Imitar a la Madre de Dios
Solemnidad de Santa María, Madre de Dios - Lucas 2 16-21
A una semana del Nacimiento del Niño-Dios, la Iglesia nos presenta para comenzar el nuevo año, la Fiesta de María, Madre de Dios.
En ninguna criatura se da tan perfectamente que Dios viviera en ella y que ella viviera en Dios como María Santísima. Entre Dios y María hubo una estrechísima relación: Dios habitó en María en toda su plenitud, haciéndola un templo sagrado y María vivió en Dios, entregada a la total realización de los planes del Creador.
De todos los privilegios, títulos y dogmas de María, éste es sin duda el mayor y de más trascendencia, pues todos los demás (Inmaculada Concepción, llena de Gracia, Virginidad perpetua, Asunción...) fueron dados en atención a este hecho tan inmenso y tan elevado: el de ser la Madre de Dios.
Sin embargo lo más importante para nosotros y lo que más desea la Santísima Virgen María -Madre de Dios, pero también Madre nuestra- es que la imitemos a Ella, pues imitándola a Ella estamos imitando a su Hijo.
¿Qué imitar de la Madre de Dios? Su espíritu de oración: María oraba y en oración la encontró el Ángel cuando le anunció el misterio de su Maternidad Divina. Su humildad y su entrega a la Voluntad de Dios: se reconoce “esclava del Señor” y se entrega a que se realice en ella todo lo que Dios quiera. Su fe a toda prueba: María creyó por encima de las apariencias y de las posibilidades humanas; creyó que lo imposible se realizaría en Ella: ser la Madre del mismo Dios.
Feliz, santo y fecundo 2012..!
Fraternalmente,
Claudio, feliz Navidad y 2012. Pide mucho por mí.
ResponderBorrarUn fuerte abrazo.
dICES Y MUY BIEN "lo más importante para nosotros y lo que más desea la Santísima Virgen María -Madre de Dios, pero también Madre nuestra- es que la imitemos a Ella, pues imitándola a Ella estamos imitando a su Hijo."
ResponderBorrarSi tuvieramos la humildad de olvidarnos de nosotros e imitar a Maria, otra cosa seris nuestra vida.
Feliz año y un fuerte abrazo
Rafael, hecho y acordate que el Señor bendice las intenciones. Se lo dijo al profeta Daniel «...fueron oídas tus súplicas...» (Daniel 10,26)
ResponderBorrarUn fuerte abrazo
Icue ¡cuánta razón tenés!
Feliz y santo año!
Hola Claudio, muchas gracias por tu recuerdo y visita. También te deseo un venturoso año, que Dios sea nuestro único mirar para saber hacer las cosas bien
ResponderBorrarCon ternura
Sor.Cecilia
Vengo a agradecer la felicitación que dejaste en mi blog y a leer tan bonita homilía sobre María, Madre de Dios, en la que nos invitas a imitarla. Con toda humildad, así lo intentaremos este Nuevo Año.
ResponderBorrarEs una maravilla comenzar el año con esta fiesta de la Virgen.
Gracias Claudio
María, Madre de Cristo, Madre de la Iglesia y Madre nuestra, ruega por nosotros.
ResponderBorrarAbrazos.
Sor Cecilia, es usted muy generosa. Un saludo afectuoso
ResponderBorrarMilitos, gracias y roguemos al Señor la fuerza de voluntad para no bajar los brazos
Visi, amen!
TE abrazo