21 de enero de 2013

¿Por que no hacerlo?


No pienses que todo tiene el mismo valor, ni que todo es igualmente aceptable. Son más beneficiosas las personas que se esfuerzan por hacer mejor las cosas que aquellas que no hacen sino desaprobarlas.

Es mucho mejor encender una luz que maldecir de las tinieblas; será más constructivo señalar lo que es correcto, más que detenerse en demostrar lo que es incorrecto.

El mundo necesita más personas que digan que puede hacerse y menos que manifiesten su convencimiento de que es imposible hacerlo.

Pero no basta eso: es mejor la persona que inspira confianza a los demás, y no la que echa un chorro de agua fría sobre los que han dado aunque no sea sino un paso en la dirección correcta.

Se necesitan más personas que se interesen en la cosas y hagan algo para corregirlas y menos que se pongan a un lado, sin hacer más que descubrir los defectos.
Ustedes son mis testigos y mis servidores –oráculo del Señor–: a ustedes los elegí para que entiendan y crean en mí, y para que comprendan que Yo Soy. Antes de mí no fue formado ningún dios ni habrá otro después de mí. (Isaias 43, 10)
Sublime la misión que Dios te ha confiado: ser su testigo y ser su pregonero.

Paz y bien




2 comentarios:

  1. Descubrir los defectos sirve para corregir las cosas,
    ¿como vas a encaminar al itinerario correcto si no has descubierto antes o avisas que el que se sigue es erroneo o lleva a un precipicio?
    Cosa disitnta es creerse que nos hallamos en posesión de la verdad y ayudar a alguien signifique que podamos criticar a los que están a su alrededor o pensems que estan errados

    ResponderBorrar
  2. El texto apunta al compromiso de cada uno por lograr una sociedad más justa, apunta a que se puede -con la verdad del Señor- mirar para el lado de los que menos tienen, caminar la calle, palpar la pobreza de espíritu y material. ¿Tienes trabajo? consérvalo para tu bien, pero trata en lo posible quebrar la rutina para ver cuando caminas que se puede hacer y que el Señor te dará las fuerzas para hacerlo.

    Padre Adolfo
    Comunidad San Pablo

    ResponderBorrar

«Porque la boca habla de la abundancia del corazón.» (Mt. 12, 34) Por lo tanto, se prudente en el uso de ellas y recuerda que en este blog no se aceptan los comentarios anónimos.