10 de mayo de 2012

El saber callar

Paz y bien
Eclesiastés 3, 1-7

Es todo un arte... cuando, donde y como se debe callar. Ese arte no lo enseña ni la ciencia, ni la reflexión, sino la propia vida. Uno se arrepiente más de hablar que de callar, aunque a veces será una obligación el que hables y callar entonces será para ti vergonzoso.

Calla cuando debes callar; jamás hables cuando no debas hablar o cuando no sea prudente que hables; espera el momento oportuno, para que entonces tu palabra sea beneficiosa... mientras tanto, conserva tu silencio. Todas las desgracias de los hombres provienen de no hablar claro, dice Albert Camus

Calla cuando estés nervioso, apasionado, no dueño de ti mismo, muy irritado o indignado; no es el momento, no es la circunstancia propicia para que hables; en esos casos el silencio es la única actitud que puedes tomar; si hablas, te arrepentirás... más tarde o más temprano... ¿para que hacer algo de lo que luego deberás arrepentirte?
“Hay un tiempo para cada cosa, y un momento para hacerlo bajo el cielo... un tiempo para callarse y otro para hablar.”
Calla, pero que tu silencio no sea hostil, sino amable; que calle tu boca, pero que tu rostro hable con la sonrisa de la bondad y de la comprensión. Las grandes elevaciones del alma no son posibles sinó en la soledad y en el silencio... como dice Ernest Hemingway “...se necesitan dos años para aprender a hablar y sesenta para aprender a callar.”

Fraternalmente,



Dominus Providebit

2 comentarios:

  1. Es tan fructifero poner esto en practica....a mi me viene de perlas porque al ser comunicativa he perdido tantas veces mi "sitio" por dejar suelta la lengua...aisssss...pero Gracias a Dios la Vida te enseña a saber "templar"las situaciones.....

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  2. Solo a El el honor y la gloria, por siempre!

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«Porque la boca habla de la abundancia del corazón.» (Mt. 12, 34) Por lo tanto, se prudente en el uso de ellas y recuerda que en este blog no se aceptan los comentarios anónimos.