Enciende una luz

¡Paz y bien para tod@as!

¿Cómo, pues, invocarán a aquel en el cual no han creído?
¿Y cómo creerán en aquel de quien no han oído?
¿Y cómo oirán sin haber quien les predique?
(Rom 10, 14 )


Por eso vayan y hagan que todos los pueblos sean mis discípulos.

Bautícenlos, en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo,
y enséñenles a cumplir lo que yo les he encomendado.
Yo estoy con ustedes todos los días hasta que se termine este mundo. (Mt. 28, 19-20)

Dios los bendiga!

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Te damos gracias, María

El Espíritu es animoso, pero la carne es débil

En la fiesta de los Tabernáculos. Joaquín y Ana poseían la Sabiduría. (El Hombre - Dios)