La voluntad de Dios
La voluntad de Dios nunca te llevará: donde la gracia de Dios no te pueda sostener, donde los brazos de Dios no te puedan cargar, donde las riquezas de Dios no puedan satisfacer tus necesidades, donde el poder de Dios no pueda proveerte, donde el Espíritu de Dios no pueda trabajar en ti, donde la sabiduría de Dios no te pueda enseñar, donde el ejercicio de Dios no pueda protegerte, donde las manos de Dios no puedan moldearte, donde el corazón de Dios no pueda envolverte, donde la misericordia de Dios no pueda sostenerte, donde la paz de Dios no pueda calmar tus miedos, donde la autoridad de Dios no pueda regirte, donde el consuelo de Dios no pueda secar tus lágrimas, donde la palabra de Dios no pueda alimentarte, donde los milagros de Dios no se hagan para ti donde la omnipresencia de Dios no pueda encontrarte.